Maniobrable, ligera y fuerte. Usada durante más de 25 años en el ciclismo de montaña por alguna razón, las ruedas de 26 pulgadas arrinconan y aceleran sin igual, con gran precisión.
A lo largo de años de experiencia hemos desarrollado un principio muy efectivo que puede encontrarse ahora en todas nuestras bicicletas de montaña. Este concepto incluye: vainas cortas, un tubo de dirección de holgura angular y un ángulo empinado del tubo del sillín. Las vainas cortas te ofrecen una gran maniobrabilidad en las esquinas, la holgura angular del tubo de dirección te proporciona todo el control en los descensos y el ángulo empinado del tubo del sillín crea la mejor posición de asiento para unas subidas eficientes. La combinación mágica de estas 3 medidas clave también desemboca en la mejor distancia entre ejes y longitud de la cabina para cualquier tamaño de cuadro. El resultado es la mejor combinación de propulsión, maniobrabilidad y control.
El proceso de hidroformado usa líquidos a presión extremadamente alta para darle la forma deseada al aluminio en un molde. Una de las mayores ventajas del proceso de hidroformado está resumida en el término “flujo de fuerza”. Esto significa que cada punto del cuadro está optimizado no solo para la mayor fuerza y rigidez, sino también para el mejor “flujo de fuerza”. Además de las ventajas técnicas, el proceso de hidroformado permite los diseños más deslumbrantes.